domingo, 23 de diciembre de 2012

Un Ojo Maligno II

(1 John 2:16)  Porque todo lo que hay en el mundo -los deseos de la carne, la codicia de los ojos y la ostentación de la riqueza.- Todo esto no viene del Padre, sino del mundo.

La codicia de los ojos es una de las mayores tentaciones hoy día. Dios desa que nuestro mayor deleite sea El mismo y que en toda la belleza que nos rodea, encontremos su pincel y paleta de colores. Hoy día la industria del entretenimiento se está robando las almas de los creyentes, incluso en la iglesia. Estamos cautivados por ipods, juegos en computadora, la internet, etc. Todos esos placeres visuales compiten por el espacio disponible en nuestra imaginación (pantalla del alma) para alejarnos de Dios y mantenernos cautivos en nuestras bajas pasiones. Viviendo así jamás podremos comprender lo que Dios quiere mostrarnos y terminamos dando un falso reporte como los espías.


Daniel fue un hombre que se comprometió a resistir las indulgencias que su posición le concedía. Rehusó la comida del rey y prefirió deleitarse en la Presencia de Dios de modo tal que en 70 años de ministerio nunca perdió el enfoque.

Hoy día debemos santificar nuestra imaginación permitiéndole a Dios que nos ayude a visualizarle, que Su revelación, Su belleza nos cautive mas que la internet, la comida, la TV y demás. Vivir así nos ayudará a mantener un ojo sano y no uno maligno.

Un Ojo Maligno

 
(Matthew 6:22)  La lámpara del cuerpo es el ojo;  así que,  si tu ojo es bueno,  todo tu cuerpo estará lleno de luz;

(Matthew 6:23)  pero si tu ojo es maligno,  todo tu cuerpo estaráen tinieblas. Así que,  si la luz que en ti hay es tinieblas,  ¿cuántas no serán las mismas tinieblas?


Los versos anteriores hablan de poner la mirada en las cosas eternas, celestiales porque un ojo maligno es peligroso. Cuando el ojo está saludable y se fija en un solo objeto, a imagen es clara. Si vibra, se mueve entre varios objetos diferentes, no ve claramente, está enfermo. Todo se ve confuso. La persona es entonces inestable porque el ojo regula la motricidad. Basicamente lo que Jesús dice es que si ponemos nuestro enfoque en las cosas de arriba, del cielo, nuestra conducta será estable. El ojo es el director y guía de nuestra conducta. Si se enfoca exclusivamente en los objetos terrenales, el ojo estará enfermo; un ejemplo es la avaricia, que podría estar gobernando nuestros pensamientos y acciones por lo tanto haciendonos tener una perspectiva incorrecta de los eventos que suceden a nuestro alrededor.

Me parece que los espías tuvieron una interpretación equivocada de la tierra y el momento en el que vivían debido a que sus ojos eran malignos. Estaban viendo pero al final no vieron lo que Dios les estaba mostrando. Vieron que la tierra se tragaba a sus habitantes mientras que Caleb pudo ver que la tierra estaba siendo entregada en sus manos.

Lo que aprendo de esta lección es que antes de orar por mas revelación para nuestra vida y los planes de Dios, debemos estar seguros de que tenemos un ojo sano, de que nuestra mirada está puesta en las cosas de arriba. De otro modo, lo que Diso nos muestre podremos mal interpretarlo y nos puede conducir a la desesperanza y desobediencia antes que lograr el objetivo de Dios, animarnos a seguir y conquistar en Su Nombre.

La Necesidad de una Visión Iluminada

(Numbers 13:27)  Les contaron lo siguiente: "Fuimos al país donde ustedes nos enviaron; es realmente un país que mana leche y miel, y estos son sus frutos.

(Numbers 13:28)  Pero, ¡qué poderosa es la gente que ocupa el país! Sus ciudades están fortificadas y son muy grandes. Además, vimos allí a los anaquitas.

(Numbers 13:29)  Los amalecitas habitan en la región del Négueb; los hititas, los jebuseos y los amorreos ocupan la región montañosa; y los cananeos viven junto al mar y a lo largo del Jordán".

(Barnes)  The Amalekites - See Num 14:25 note.
The Canaanites - i. e. those of the Phoenician race: the word is here used in its narrow sense: compare Gen 10:15-18 note.

(Numbers 13:30)  Caleb trató de animar al pueblo que estaba junto a Moisés, diciéndole: "Subamos en seguida y conquistemos el país, porque ciertamente podremos contra él".

(Numbers 13:31)  Pero los hombres que habían subido con él replicaron: "No podemos atacar a esa gente, porque es más fuerte que nosotros".

(Numbers 13:32)  Y divulgaron entre los israelitas falsos rumores acerca del país que habían explorado, diciendo: "La tierra que recorrimos y exploramos devora a sus propios habitantes. Toda la gente que vimos allí es muy alta.


(Numbers 13:33)  Vimos a los gigantes - los anaquitas son raza de gigantes - Nosotros nos sentíamos como langostas delante de ellos, y esa es la impresión que debimos darles".

Desde hace algunos días  he estudiado este pasaje y me he preguntado ¿Por qué si todos los espias vieron lo mismo en Canaán, unos dan un reporte y otros dan otro muy diferente? Basicamente los 10 espías vieron que la tierra que exploraron "Se tragaba a sus habitantes" mientras que Caleb miró que "Su cobertura había sido quitada y el Señor los entregaría en sus manos". ¿Cuál fue la diferencia?

Evidentemente la diferencia estaba en el corazón de los hombres (Caleb tenía un espíritu diferente de acuerdo al Señor). Cuando estudiamos la vida de Caleb nos damos cuenta de que era un hombre que estaba comprometido con la visión de Dios. Seguramente se le había dado a conocer la profecía concerniente a la tribu que habría de gobernar sobre una parte de Canaán conforme a la promesa de Dios a Abraham, Isaac y Jacob.

(Genesis 49:8)  A ti, Judá, te alabarán tus hermanos, tomarás a tus enemigos por la nuca y los hijos de tu padre se postrarán ante ti.

(Genesis 49:9)  Judá es un cachorro de león, - ¡Has vuelto de la matanza, hijo mío!- Se recuesta, se tiende como un león, como una leona: ¿quién lo hará levantar?

(Genesis 49:10)  El cetro no se apartará de Judá ni el bastón de mando de entre sus piernas, hasta que llegue aquel a quien le pertenece y a quien los pueblos deben obediencia.

(Genesis 49:11)  El ata su asno a una vid, su asno de pura raza a la cepa más escogida; lava su ropa en el vino y su manto en la sangre de las uvas.

(Genesis 49:12)  Sus ojos están oscurecidos por el vino, y sus dientes blanqueados por la leche.

así como Jacob se aferró a la promesa de un Rey que gobernaría con justicia a las naciones y estubo dispuesto a engañar a fin de obtener el honor de que de su simiente viniera tal rey, Caleb sabía que su rol es estos momentos de la historia era crucial para el establecimiento del reino de este Mesías que saldría de sus lomos. Vemos repetirse esta historia en la vida de David, quien desde que conocemos de él, se propuso en su corazón no dar descanso a sus ojso hasta ver establecido este reino, hacer su parte en el tiempo que Dios le había dado. Es este compromiso el que les dió a estos hombres una fe diferente. Igual que abraham, sabía que de sus lomos saldría este Mesías así que estuvo dispuesto a entregar en sacrificio a su hijo porque sabía que Dios haría algo, resucitarlo si fuera necesario. De esta manera estos hombres mostraon su compromiso con Dios y su fe, es decir, la convicción de que este Mesías vendría y cumpliero el rol que les correspondía en su momento oportuno. creo que Caleb estaba en este mismo espíritu, por esa razón vio la tierra de Canaán con ojos diferentes y dió un reporte totalmente diferente por el cual incluso estuvo a punto de morir.