The house of
prayer is under his authority. The singers and the musicians
are under him.
He’s the main religious leader in the land. He had authority over the
storerooms in the house of God, the temple complex. He was allied with Tobiah…
En
el caso de este recuento, el líder de la casa de oración había comprometido su
autoridad al entrar en alianza con personas que se oponían a la construcción y
movilización de la casa de oración. La alianza consistía en una alianza
familiar y económica.
Hoy
día esto es algo contra lo cual los líderes de las casas de oración, deberán
batallar siempre. Las presiones económicas son frecuentes y la necesidad de
proveer para la familia puede sabotear el compromiso con la Casa de Oración.
Definitivamente el amor al dinero es raíz de todos los males.
La
escasez por la cual pasan algunos líderes no están destinadas a dejarlos
perecer sino mas bien, a fortalecer su espíritu y enseñarles a no amar el
dinero y aprender depender de Dios. Muchos que no esperaban pasar por estas
pruebas, abandonan su carrera ministerial. Sin embargo en otros casos, creo que
muchos siervos y misioneros se ven obligados a abandonar la labor que Dios les
ha encomendado precisamente por la falta de provisión que debería estar
llegando a través del compromiso de cada creyente en la ciudad.
Cuando
no hay provisión en la casa de oración, las oraciones cesan, los cantos no se
escuchan, la adoración es silenciada. Cuando la Iglesia no provee para la Casa
de Oración, algunos líderes comprometen el servicio por recibir finanzas.
En
el caso de Nehemías, la alianza del líder de la casa de oración había llegado
tan lejos que se habían casado entre estas familias de las que el Señor
claramente había dicho que no se hiciera. Una visión comprometida detendrá la
labor de la casa de oración. El líder debe ser la persona mas comprometida con
Dios de manera que no se comprometa con el dinero, relaciones, política y
otros.
En
nuestro país vemos a veces como las congregaciones se separan a causa de
intereses políticos. Comprometemos nuestra autoridad espiritual por un puesto
en el gobierno, por salario y por cosas semejantes. Mucho de lo que sucede en los
ministerios gira alrededor de programas y servicios destinados a obtener
dinero. Incluso proyectos sociales pueden tener una agenda escondida detrás de
la agenda “noble” que presentan. Si los líderes de la Iglesia no tienen la
altura de Nehemías no podrán liderar la reforma social.
Cada
vez mas las personas tienen recelo de los proyectos cristianos. Ha habido
despilfarro y compromiso con las finanzas antes que con el Señor. Esto ha
empujado a muchas personas a alejarse de las iglesias y ser incrédulos de la
verdad del Evangelio. No podremos conseguir seguidores que se comprometan a
construir la casa de oración si nuestro compromiso no va más allá que el dinero
o fama.
Durante
el ministerio que desarrollamos tuve la oportunidad de conocer a una persona
admirable ( lo se ahora que le conozco mejor). Esta persona es tan honesta que
desde el principio me dijo que no creía en Dios y que no creía en los programas
de liderazgo. Y es que ya había tenido malas experiencias con misiones transformadoras
de la nación. La razón del fracaso de proyectos políticos es que no son
genuinos, casi siempre las personas van detrás de fama, poder o dinero, una vez logran, desisten. En mi
experiencia, Los mejores líderes son ahora muy recelosos en cuanto a la agenda
de cualquier proyecto. Si no tenemos la estatura de un líder como Nehemías,
definitivamente no lograremos contar con los mejores elementos disponibles o se
retirarán una vez que descubran que la maravillosa visión no era genuina.
Si los reformadores no están en acuerdo con Dios, ¿Cómo pretenden reformar la sociedad? No se trata de las reformas solamente sino mas bien, de unos líderes reformados desde su interior ya que nuevas leyes sin el compromiso de seguirlas no tendrán un efecto transformador de largo plazo. Solo los líderes reformados desde su interior podrán ser usados por Dios para transformar la nación.
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